Aun cuando la Constitución
de 1824 no contenía referencia alguna sobre la pena de muerte, este silencio no
significaba que estuviera ausente de la normatividad penal que regía en la República
y que no se aplicara y se ejecutara en la realidad.
El documento que
el Archivo Histórico te quiere compartir en esta ocasión, habla sobre un
decreto publicado en 1830 que hace referencia a los raptores y forzadores de
mujeres que sufrirán la pena de muerte por este hecho.